El proyecto dispone de 7 viviendas unifamiliares con el programa de día ubicado en la planta baja, junto con un jardín y la zona de noche en la planta primera, con una terraza. En la planta sótano, el encargo fue que cada vivienda dispusiese de un garaje para dos vehículos.
La propuesta del equipo técnico consiguió dar salida a esta demanda con una única rampa de garaje y una zona común en la cual se ubican las puertas de los garajes individuales.
Un aspecto importante en el desarrollo de la idea inicial de proyecto fue la máxima del promotor de que todas las viviendas dispusiesen de un jardín en planta baja.
Debido a la escasa profundidad de la parcela (25m) para desarrollar dos viviendas enfrentadas, el espacio disponible para colocar dos jardines en el centro de la parcela parecía inviable. Al final, se llegó a la solución de hacerlos al tresbolillo, desarrollando cada jardín con la anchura del salón y haciendo que la pared de la cocina fuese ciega, para que la vivienda enfrentada pudiese tener el jardín contra ese muro. De este modo se consigue el objetivo propuesto por el promotor y además se asegura la privacidad de cada vivienda.